I 169
Creencias docentes
estigmas más enraizados contra las personas homosexuales (Rentería, 2017),
que reducen su existencia a la marginalización. Los límites de este estudio no
permiten contrastar el discurso de la docente con la realidad del contexto don-
de desempeña su práctica pedagógica; sin embargo, el atribuir este tipo de pro-
blemáticas a los homosexuales, de manera directa, permitiría concluir que este
cúmulo de prejuicios forma parte de las creencias de la docente en relación
con la homosexualidad (Rodríguez, 2018). Es interesante analizar este aspec-
to, dado que las y los estudiantes se encuentran inmersos en medio de una
diversidad de creencias sobre la sexualidad y el género que, ante una falta de
formación en educación sexual, puede generar que se vean inuenciados por
las creencias de sus docentes.
Como se mencionó al inicio de esta sección, se identicó una cuarta
creencia, según la cual se debe respetar a aquellas personas con una orien-
tación sexual distinta a la heterosexual. Esta parte de una narrativa sobre el
respeto a las personas y se ubica en aparente contraposición a las tres creencias
docentes predominantes identicadas en este estudio, dado que responde a un
enfoque más integral. Dicha narrativa se manifestó en el discurso aparente-
mente contradictorio de la Profesora 5 (Cívica), quien señaló que una persona
no es homofóbica, aunque piense que la homosexualidad es anormal. Desde
esta perspectiva, se sugería que lo anormal no responde a lo no común, sino
a una forma inadecuada de ser. Una contradicción similar se observa en el
discurso del Profesor 2 (Matemática), quien señaló que la homosexualidad “es
una enfermedad” y, a su vez, armó: “no creo que, porque tengan inclinacio-
nes, homosexual, o gay, o lesbiana, se les falte el respeto”.
Esta aparente contraposición responde a la estructura psicológica de los
sistemas de creencias que no necesariamente cumplen con criterios lógicos
(Guerra, 2013), lo que posibilita la existencia de nociones opuestas, que con-
viven en el sistema intramental de cada docente. No obstante, las creencias
predominantes, producto de la socialización temprana de los individuos (Er-
nest, 2005), son aquellas que tendrán un mayor impacto en el moldeamiento
de la práctica pedagógica docente. Por tanto, al parecer, las creencias negativas
sobre la homosexualidad tendrían un mayor peso al formar parte del sistema
de creencias docente predominante.
En contraste a todo lo expuesto, el Profesor 1 (Matemática) se presenta
como un contraejemplo de lo reportado. Aunque las limitaciones de la pre-
sente investigación no permiten analizar las causalidades de la conformación
de las creencias del docente en cuestión, podemos suponer que su experiencia
de vida pudo inuir en el enfoque, en apariencia, más integral que muestra en
su discurso. Este docente elabora una denición integral de la sexualidad dife-
renciándola claramente del sexo. Añade la dimensión emocional y evita que la
sexualidad sea reducida a las relaciones sexuales: “La sexualidad que no sim-
plemente es la vida sexual, sino también la vida emocional […]. Sexo es algo
simple, sencillo, biológico, un tanto físico. En cambio, el otro [la sexualidad] ya
tiene que ver más con [lo] emocional, sentimental, psicológico”.